miércoles, 4 de octubre de 2017

Cómo dar clase de religión a jóvenes de 17 años

¿Difícil dar clase de Religión a jóvenes?... puede ser. Pero también: ¡apasionante! 

Voy a compartir con vosotros el modo que he encontrado y que resulta eficaz para que los chicos pre-universitarios profundicen en los aspectos de la fe. 

Las realidades son muy diferentes no sólo de un país a otro sino también entre ciudades, colegios y barrios del mismo país. Por eso lo que comparto es simplemente lo que estoy aplicando, lo que me funciona aquí y ahora, pero que quizás puede inspirar a alguno que se encuentre en una situación parecida. 

Dicho esto, empezamos:

 1. Márcate un fin general para tus clases 

Hacer esto cambia el modo de dar las clases. En mi caso, al convivir con el grupo, no sólo en la clase de religión sino también visitando sus familias, en el camino de Santiago, etc. percibí que necesitaban ser capaces de hablar de su fe en la universidad. Así que ése es mi fin al impartirles clases de religión. Esto significa que al preparar la clase concreta voy a buscar que les ayude no sólo a conocer, sino también a expresarse sobre su fe. 

Éste objetivo en sí mismo ya para algunos resulta interesante. Se lo explico así en la primera clase del curso. Y les explico el porqué con ejemplos claros, a veces leyéndoles un mensaje de WhatsApp o un tweet que me ha llegado de antiguos alumnos. 

Los consejos que siguen a continuación son para aplicarlos en cada clase de religión. 

2. Reza 

No hables delante de ellos, no recites una oración delante de ellos, habla con Dios y pídele que siembre sus dones en el corazón de cada uno de tus alumnos ¡Funciona! Dios te oye siempre y además das buen ejemplo!

3. No hables de temas; preséntales problemas 

Aunque tienes que preparar temas y saber explicarlos muy bien, no empieces diciéndoles el esquema ni lo que te ha costado prepararlos, ni tus fuentes… Presenta un problema inmediatamente. Éste es el punto práctico más importante. El que mejor me ha funcionado con alumnos de segundo de bachillerato. En la tercera clase ya están esperando qué problema les vas a presentar. Si es posible procura que sean casos reales. Es aquí donde te juegas su atención. Si vas hablar de el principio de doble efecto, no lo digas, presenta un caso, preséntales un problema. Esto hay que hacerlo en unos tres minutos como mucho cinco.

4. Haz que hablen. 

Si tu finalidad, como la mía, es que aprendan a hablar de su fe en la universidad, es importante que lo hagan ya en la clase de religión. 

Os explico cómo lo hago yo para que no sea un caos: 

- Divido a la clase en equipos de cuatro. 

- Presento el problema. Por ejemplo con este video

- Les marcó el tiempo, tienen cinco minutos para resolverlo como cristianos católicos. 

- A los cinco minutos uno de ellos como portavoz tiene que dar la solución, todos escuchan. 

- Después de que cada portavoz ha dado su solución... complico el problema. 

- Luego más difícil todavía o con alguna variante. Les doy otros tres minutos para que encuentren la solución, a veces sólo dos minutos. 

- Ahora, como portavoz, tiene que hablar otro que no haya hablado en la primera ocasión representando al equipo.

- Llegados a este punto, todos quieres saber qué es lo que dice la iglesia: hay que ofrecerles una respuesta clara concisa y directa, como por ejemplo las del YOUCAT. Hay que dejar tiempo para esto, hay que explicarlo sin eternizarse y hay que resolver las dudas que hayan surgido allí mismo. 

Eso implica que lo hayas preparado muy bien y que hayas previsto sus objeciones. Para ello aconsejo que mires "Preguntas jóvenes a la vieja fe" aquí

6. Recuérdales lo que siempre deben traer: su cabeza 

Quieres ayudarles a que usen su cabeza, no tienen que partir de respuestas hechas, tienen que encontrar lo atractivo, bondadoso y útil de la propuesta católica para una vida humana llena de sentido.

7. Haz una llamada a la acción 

Tienes que acabar dinámicamente, aconseja la lectura de un libro, aconseja suscribirse algo, aconseja seguir a un tuitero católico o recoge alguna hoja haciendo un par de preguntas. Comparto dos formas que me funcionan bien:

- Forma su identidad católica aprovechando las redes sociales

Cada equipo de cuatro puede crear un perfil en Twitter (P. ejemplo @clasereli1, si no quieren usar sus perfiles propios). Una llamada a la acción cuando quedan cinco minutos de clase o 10, puede ser: "escribid un tuit donde resumas de forma atractiva las ideas que hemos comentado en clase, o donde expongas la convicción que has fortalecido o que has descubierto" 

Este sistema tiene la ventaja de que puedes indicarles a quién seguir en Twitter (por ejemplo les recomiendo seguir a su propio obispo o a Monseñor Munilla que siempre comenta la actualidad desde el punto de vista católico de una manera certera, precisa y juvenil)

- Si no usan el móvil en la clase o no tienen redes... reparte algo donde pueden escribir y haz algo de lo anterior. 

8. Puntúa

La puntuación podría ser por equipos, por implicación y por actitud. Sin embargo la puntuación es una manera de fomentar la atención, no sería lo más importante si ya las fomentado como he explicado antes. Les motiva mucho más el resolver el problema que han enfrentado que el saber que van a recibir una nota que (en España actualmente) no les cuenta para la evaluación final. 

 9. Anuncia los temas con previsión

 A veces preparo la portada de un cómic donde salen ellos mismos dialogando sobre el tema de la próxima clase. Crea expectación por el tema siguiente, suelo ponerlo fuera de las clases para que vayan pensando sobre el tema que trataremos. 




¿Qué opinas de estos consejos para impartir la clase de religión a preuniversitarios? Me encantaría leer tu comentario. Hay muchas formas de dar una clase y efectivamente mucho depende del profesor, de su carisma o de su preparación, pero dado que me parece que esta manera responde a la psicología de los jóvenes preuniversitarios, iré contándoos en el blog qué tal nos va este año clase por clase por si puede ser de utilidad. 

Mucho ánimo y a darlo todo para compartir el don más maravilloso que tenemos: ¡LA FE! 



2 comentarios:

  1. Hola Padre. Un cordial saludo desde Caracas Venezuela. Estoy muy interesada en aprender más para animar y renovar las clases de Religión. Nuestros jóvenes necesitan una nueva estrategia que los enamore de Cristo.

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  2. Hola Padre. Un cordial saludo desde Caracas. Me gusta trabajar con jóvenes y doy clases de religión a veces me va muy bien pero otras veces siento que no les llega el msj. Deseo cambiar la estrategia y aprender nuevas formas de dar las clases de religión. Gracias

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